Dolor de pies por estar muchas horas de pie: causas y soluciones reales

Dolor de pies por estar muchas horas de pie: causas y soluciones reales

Pasar muchas horas de pie, caminar sobre superficies duras o trabajar con calzado rígido puede provocar un dolor intenso en los pies al final del día. Este problema afecta a operarios, sanitarios, personal de hostelería, logística, fábrica y a cualquier persona cuya jornada transcurre principalmente de pie.

En esta guía te explicamos por qué aparece el dolor, qué lo provoca y qué puedes hacer para aliviarlo y trabajar con más comodidad.

¿Por qué duelen los pies al estar tantas horas de pie?

Cuando pasas 8, 10 o incluso 12 horas de pie, tu cuerpo soporta una carga que se va acumulando con el paso de las horas:

  • Impacto repetitivo en talón y metatarso en cada paso.
  • Falta de amortiguación, sobre todo en suelos duros como hormigón o baldosas.
  • Calzado rígido o poco flexible, como botas de seguridad o zuecos.
  • Cansancio muscular en gemelos y fascia plantar.
  • Postura forzada, que empeora a medida que avanza el turno.

Con el tiempo, esto puede provocar inflamación, sensación de “pies quemados”, pinchazos al apoyar el pie e incluso fascitis plantar.

Principales causas del dolor de pies durante el trabajo

1. Suelos duros

Trabajar muchas horas sobre superficies como hormigón, baldosas o pavimentos industriales aumenta el impacto en cada paso y multiplica la carga sobre talón y metatarso.

2. Calzado de seguridad o laboral muy rígido

Las botas de seguridad y muchos zapatos laborales están pensados para proteger, pero no para ser cómodos. Su suela es dura y, en muchos casos, no incluye una plantilla interna de calidad.

3. Plantillas de serie de baja calidad

La mayoría de plantillas originales son planas, de foam o materiales que se hunden rápido. No absorben el impacto ni sostienen el arco, por lo que el pie trabaja “sin ayuda” durante toda la jornada.

4. Falta de soporte del arco plantar

Cuando el arco no tiene soporte, se hunde ligeramente con el peso y esto sobrecarga la fascia plantar, generando dolor en la planta del pie y en el talón.

5. Jornadas largas sin descansos suficientes

Cuantas más horas pasas de pie, más se acumula la fatiga en músculos, articulaciones y ligamentos. El resultado es dolor al final del turno e incluso al día siguiente.

Cómo aliviar el dolor de pies si trabajas muchas horas de pie

1. Usar plantillas específicas para largas jornadas

Las plantillas para botas de seguridad no solo amortiguan, sino que también ayudan a repartir mejor la presión, estabilizar el talón y dar soporte al arco.

Si pasas muchas horas de pie, te recomiendo esta guía específica:

➡ Ver guía completa para trabajar muchas horas de pie

2. Hacer pequeños estiramientos durante el día

  • Estirar gemelos apoyando las manos en la pared durante 20–30 segundos.
  • Rodar una botella fría o una pelota bajo la planta del pie.
  • Realizar movimientos circulares con los tobillos en los descansos.

3. Cuidar el calzado

Siempre que tu trabajo lo permita, elige calzado con algo de flexibilidad y suela con cierto nivel de amortiguación. Y si usas botas de seguridad, es casi obligatorio mejorarlas con plantillas adecuadas.

4. Descansar con los pies en alto

Al llegar a casa, elevar los pies unos minutos ayuda a mejorar el retorno venoso y reducir la inflamación.

La solución más eficaz: plantillas diseñadas para el trabajo duro

Las plantillas CLIVS para botas de seguridad están pensadas para entornos exigentes y jornadas largas. Ofrecen:

  • Amortiguación en talón y metatarso para reducir el impacto en cada paso.
  • Soporte anatómico del arco para mejorar la postura y reducir la carga en la fascia.
  • Estabilidad en el talón, evitando desplazamientos dentro del calzado.
  • Materiales resistentes, que no se hunden a los pocos días.
  • Compatibilidad con botas de seguridad y calzado de trabajo rígido.

Si trabajas muchas horas de pie, estas plantillas pueden marcar una gran diferencia al final de la jornada.

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Conclusión

El dolor de pies por estar muchas horas de pie no es algo “normal” con lo que haya que convivir. Con la combinación adecuada de buenas plantillas, pequeños estiramientos y descanso, puedes trabajar con mucha más comodidad y reducir el cansancio al final del día.

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